.

.

martes, 12 de enero de 2010

Necesito escribirte un poema para contarte que ya no vivo porque no encuentro el porqué. Que ya no me siento única. Hemos dejado de ser libres y, ni tú eres para mi, ni yo me pertenezco a mí misma. Porque en estos tiempos no importan las pequeñas cosas. Discutir es la droga de cada día. Por eso mis irrevocables síntomas se reflejan en tus pupilas, y el verde de tu circunferencia se apaga cuando me ve llorar. Y todo junto es un cúmulo de mierda.

Hemos creado un mounstro.

Aun así intento recordar, lo bueno que fue el pasado, aunque solo sea para imaginarme que no vivo este presente. Que seguimos siendo dos. Nosotros. El y ella, la vieja historia.
La noche me desvela, me envuelve en un agitado ruido. Headache. Depresión. Muerte. Y si te odió será porque no paro de amarte y, si te envidio será porque me enloquecen tus palabras y, si me enfado será porque he enloquecido. Y si río será cuando vuelva a nacer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario